SOBRE NOSOTROS
UNA LARGA TRADICIÓN Y CALIDAD INMEJORABLE
O Lar da Sabela abrió sus puertas en el 2010 en la ourensana plaza Eironciño dos Cabaleiros. La ourensana Isabel Hermida se quedaba en aquel momento con el local de El Facha, uno de esos lugares emblemáticos de la capital. Javier Gómez cogió el relevo del restaurante hace tres años. Se trata de uno de los pocos establecimientos en los que es posible comer cocido cualquier día del año. «Lo hacemos cada día sin excepción», afirma. Esa costumbre la mantuvieron. También la ración de solomillos de cerdo, la de pimientos de padrón, de zamburiñas, las albóndigas o de croquetas. Poco a poco fueron incrementando la carta de vinos y también la oferta de cócteles, vermús y combinados pensados para la hora del aperitivo y para las tardes en la terraza. El cambio más grande de O Lar da Sabela llegó recientemente, y coincidió de pleno con la pandemia. Se acaban de mudar de local, a uno más grande, más nuevo y, lo más importante, situado en la misma plaza, justo frente al anterior.